domingo, 25 de marzo de 2007

Poesía XIV

 

Fina arena del desierto

 

Dices que la magia es lo que pasa,

dices que tal vez mañana, que el perfume, que mi ausencia.

Oigo en mí recuerdos de unas voces escondidas detrás de unos fantasmas,

veo en esta tarde solitaria caer las hojas de un otoño en mi ausencia,

imagino ese rostro tuyo que no sé si existe hoy,

sangran mis labios queriendo sentir que quizá era cierto,

se me agota el alma con las palmas vacías de arena,

siempre así, vacías...  

 

Y juegas al escondite cuando estoy en el lejano territorio de mis certidumbres,

te vuelves invisible cuando estás casi a mi lado,

lloran en silencio mis sonrisas de ojos puros,

ya no saben que aguardar mi sueños agotados de andar.

 

Y qué sigue al descubrir el lado opaco de los espejos,

cuáles son los pies que darán pasos oscuros sin la luz que me guiaba,

cuántos golpes contra el vidrio soportará un ave desterrado,

para qué el deseo, para qué la magia, para qué los sueños.

 

Te dices en silencio lo que nunca pronunció tu voz,

te dices que los otros, que mi vuelo, que lo incierto.

Oigo cien verdades que enlutan mi boca,

veo frente a mí la insoportable desaparición de todos los presentes,

ya no quiero imaginar ningún mañana.

Se sellaron las puertas del cielo nuevamente,

se resquebrajó la perfecta obra de mis trazos invisibles;

No existía, ahora lo sé...

 

Pablo Rego ©2007

miércoles, 21 de marzo de 2007

Poesía XIII

 

Este texto es una impresión de una extraña soledad que viví en mi estadía en Buenos Aires el pasado mes de febrero. Surgió como muchas otras letras, de la música, de un tema llamado "Bahía" interpretado por un dúo de Jazz en "El perro andaluz" de San Telmo.

 

Distancia de nosotros

 

Mis huellas dactilares no consiguen conformarse sin tu piel,

mis pupilas ven fragmentos de ti en todas partes,

mis deseos inventan fantasmas impostores que se esfuman al nombrarte,

...¿y por qué no está tu cuerpo en tu alma aquí a mi lado?

 

Es un aire bahiano que me lleva la belleza,

fue un aire flamenco que me llevó en su aventura

y es nuestro encuentro un cruce de avenidas de barrio o centro, de río y de plata.

 

Esta vez, no hay aves de mal agüero, no hay hienas ni malvados;

Terminó el baile de máscaras, la confusión adrede y el ensueño.

 

Pablo Rego ©2007

jueves, 8 de marzo de 2007

Día mundial de la mujer

 

Con esas deliciosas diferencias que nos enloquecen y nos emocionan, con eso que un hombre inteligente debe aprender para ser completo, con la gracia del nacimiento, con la suavidad de una piel que no es la propia... con todo eso, el amor y los silencios profundos... ¡Feliz día mujeres!

 

El día de la mujer mundial

 

Quien escribirá la historia de lo que pudo haber sido?,
yo que soñaba despierto ya no sueño dormido,
con quien estarás ahora?,
quien te va a dar de comer?,
en el día mundial de la mujer.

Voy a seguir hasta encontar una parrilla en Dolores,
no miraste bien en mis espejos retrovisores,
ahora que pusiste el freno espero que encuentres algo bueno que morder, que morder.

Eduardo subí la radio, yo enciendo un petardo,
cuanto falta para llegar a cualquier lugar?,
ojalá te sientas solamente un poco mal,
en el día de la mujer mundial,
en el día de la mujer mundial.

Quien está preparado para ser un chico abandonado?,
quien tiene el blanco del camino en el ojo marcado,
Edu falta mucho para parar y comer?,
es el día mundial de la mujer.

No entendí si vas a ser libre o esclava,
no entendí si fui tu dueño o un borracho que pasaba,
soy grande pero tengo algo que aprender,
es el día mundial de la mujer.

Elegí pena u olvido o sudor compartido,
oajlá no me arrepienta de haberme conocido,
lo importante es que nunca pude hacerte sentir mal,
feliz día de la mujer mundial,
el día de la mujer mundial.

Andrés Calamaro

miércoles, 7 de marzo de 2007

Imagina... o mejor no...

 

Un viejo blues

 

No se por qué imaginé

que estabamos unidos

y me sentí mejor

 

Pero aquí estoy
tan solo en la vida
que mejor me voy

 

Como un viejo blues

me hizo recoradar

momentos de mi vida

y mi primer amor

 

Pero aquí estoy

tan solo en la vida

que mejor me voy

 

Celeste Carballo / Pappo

Poesía XII

 

Declaración de amor

 

Si alguien va a matarme mejor que seas tú.

Si decides beber mi sangre

consérvala pura, déjala fluir

para que valga la pena sentirse morir.

 

Si vas a cortarme, acaríciame

y que mi piel se abra sola

ante la línea de tu existencia filosa…

desintegra mi cuerpo latente… lo harás…

 

Si alguien a de faenarme

que seas tú que tanto me has dado,

que tanto de mí ya te has quedado

después de tanta vida y tanta muerte.

 

Prepara el tiro de gracia

para lo poco que me queda resguardar aun d ti.

Mis sesos, mi corazón, mi sexo,

La piel, mis ojos, mis manos… los has engullido

 

Mi alma vuelve a sonreír;

otro nacimiento, otro vuelo nuevo

atravesando continentes de dolor,

resurgiendo de entre los escombros afectivos.

 

Si alguien va a matarme mejor que seas tú,

pero hazlo dignamente, con profunda emoción.

quédate conmigo, hazlo en el presente,

quítame la vida con el alto arte de amar.

 

Cuando te comas mis restos

llévatelos calientes a la boca,

brinda antes por nosotros

bebe un trago de mi sangre a tu salud.

 

Cuando tu alma me alcance,

en algún rincón del universo,

no tendré de que culparte,

habrá tiempo, mucho tiempo

y ningún cuerpo que matar.

 

Pablo Rego - ©2007

viernes, 2 de marzo de 2007

Poesía XI

 

Especialmente dedicado para quien pueda amar con libertad desde el fondo de su alma... o lo intenta con sinceridad...

 

 

Son mis ladridos… te vas pensando que te echo y te estoy llamando.

 

Me confunden mis sueños inocentes que subsisten,

los impulsos de un pequeño animal que late aún

emergiendo del aturdimiento de esta ciudad hostil,

de las células de ese gran cuerpo de mujer que acaba perturbándome de amor.

 

Los días y las palabras no miden este camino.

Se entiende el dibujo multiforme que me sigue por las calles

viendo más allá de mi figura y de alguna otra existencia que haga un nosotros.

 

Ecos de una forma de sentir significante que se pierde en el olvido,

nuevos aires para mi corazón combativo y enviciado,

un dulce propósito futuro que no alcanzo a latir

porque se desgarra en mis manos un nuevo cuerpo

de blanda arcilla que no llega a sonreír

ni resiste mis mordiscos de cruda pasión,

ni los abrazos de un nuevo sentimiento

alejado de la historia, en el mar sin límites ni brújula,

con las manos vacías, sin llaves ni prejuicios.

 

La fuerza de una nueva vida de nuevos ojos limpios,

con sus torpezas, su optimismo y su sueño fresco.

 

Deberé ser instrumento del viento para que logres escuchar mi melodía,

quizá lo entiendas mejor, tal vez entonces te quedes.

 

Pablo Rego - ©2007